Cómo tomar linaza y para qué sirve este superalimento

Originarias de la planta del lino (Linum usitatissimum) y cultivadas desde la antigüedad en el Mediterráneo y en Asia, las semillas de lino han sido valoradas a lo largo del tiempo por su versatilidad y propiedades.
Consideradas un superalimento, estas pequeñas semillas pueden enriquecer cualquier dieta de manera sencilla y deliciosa. Su rica composición permite que sean fácilmente incorporadas en una gran variedad de platos.
En un contexto donde la alimentación consciente gana cada vez más relevancia, la linaza se presenta como una opción accesible y nutritiva.
Explorar su potencial es una invitación a redescubrir un ingrediente que puede contribuir al bienestar general.
La linaza es un recurso valioso para quienes buscan mejorar su bienestar. Para aprovechar al máximo sus propiedades nutricionales se recomienda moler las semillas antes de consumirlas.
Esto evita la oxidación y asegura que se obtengan todos sus beneficios. Además, es fundamental consumirlas con suficiente agua o líquidos, y no tomarlas al mismo tiempo que medicamentos orales o suplementos.
La cantidad sugerida varía entre 1 y 4 cucharadas de linaza molidas por día, siempre bajo la supervisión de un médico. Estas semillas son fáciles de incorporar en diversas comidas y meriendas, como batidos, yogures, sopas y cereales. También son una excelente opción para añadir en masas para hornear.
Las propiedades nutricionales de la linaza actúan de manera individual o conjunta, favoreciendo diversos aspectos fisiológicos. A continuación, los beneficios más destacados de su consumo:
La linaza se puede sumar fácilmente a una gran variedad de platos para potenciar su valor nutricional. Aquí, unos ejemplos.
Fuente: www.clarin.com