Un médico de 38 años murió ahogado en una peligrosa costa de Brasil tras rescatar heroicamente a sus hijas


Salvó a sus las niñas, pero él murió. Un médico de 38 años falleció tras rescatar a sus hijas que se estaban ahogando en Matinhos, en la costa de Paraná, Brasil.
La víctima fue identificada como Aníbal Okamoto Junior, informó el medio local g1. Era un psiquiatra que trabajaba y vivía en Brasilia.
El hecho ocurrió durante la tardenoche del domingo en una zona cercana a las rocas, un punto ciego para los guardavidas. Se dio a conocer que el hombre se ahogó, pero no se sabe cómo.
El cuerpo del médico fue hallado por un surfista, que intentó reanimarlo y llamó a los equipos de rescate, que lo trasladaron en helicóptero a la Unidad de Atención de Emergencias de Praia Grande, donde finalmente confirmarían su muerte. El Consejo Regional de Medicina del Distrito Federal también lo informaría en un comunicado.
“Psiquiatra dedicado, el Dr. Aníbal construyó una carrera marcada por el compromiso con la atención, la escucha y la compasión, dejando una contribución significativa a la medicina y a todos los que tuvieron la oportunidad de experimentar su trabajo y su humanidad”, se lee en el mensaje.
Según el Portal de Transparencia del GDF, Aníbal era médico clínico de la Secretaría de Salud.
Las niñas, a diferencia de su padre, pudieron salir del agua ayudándose de las piedras.
Se informó que el cuerpo de Aníbal será enterrado el miércoles en el cementerio Campo da Esperanca, en Brasilia.
Matinhos es una ciudad balnearia del litoral de Paraná, a poco más de 100 km de Curitiba, famosa por su “doble cara”: el centro/playa de Matinhos y el sector de Caiobá, que suele ser el más concurrido. En general es un destino bien urbano para ir a la playa, con costanera y servicios, y en temporada de verano se llena de turistas.
En la costa hay rescates frecuentes; lo más seguro es bañarse donde haya guardavidas y respetar las banderas.
En el litoral de Paraná (y en Matinhos en particular) son muy comunes las corrientes de retorno: canales angostos de agua que vuelven mar adentro con fuerza y velocidad, muchas veces entre bancos de arena. Son peligrosas porque desde la orilla pueden parecer una zona “más tranquila” y la gente se mete justo ahí, pero esa franja te puede llevar rápidamente hacia aguas más profundas.
En Matinhos además hay puntos que favorecen esas corrientes por la presencia de moles/espigones (estructuras de piedra que entran al mar). Los bomberos del estado advierten que pueden formarse corrientes fuertes a ambos lados de esas estructuras y por eso recomiendan bañarse en áreas cubiertas por puestos de guardavidas.
Como en plena temporada se llena de gente, muchos se meten sin conocer el mar o se confían. El propio CBMPR señala, por ejemplo, que la Praia Mansa de Matinhos (pese al nombre) registra numerosos incidentes por esa falsa sensación de seguridad y también por riesgos asociados a zonas de piedras/corrientes específicas.
Fuente: www.clarin.com



