Sur Finanzas: abrieron el teléfono del financista vinculado a Chiqui Tapia y empiezan a analizar su contenido


El dueño de Sur Finanzas, Ariel Vallejo, se presentó el 2 de diciembre en la justicia federal de Lomas de Zamora. Desde el día anterior lo buscaban para secuestrarle su celular. Fue a entregarlo junto con el de su mamá, quien figura como presidenta de la empresa, y de los dos móviles dio las claves. Los teléfonos ya fueron abiertos.
Fuentes judiciales informaron a Clarín que la Policía Federal accedió a los teléfonos y extrajo su contenido. “Ahora hay que analizar lo que hay, si es que hay algo“, dijo con escepticismo uno de los investigadores que trabajan en el caso.
El análisis forma parte de un trabajo más amplio que ordenó el juez federal de Lomas de Zamora Luis Armella. El magistrado dispuso que la Policía Federal, la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado del Poder Judicial de la Nación (DAJUDECO), la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC) de la Procuración General de la Nación, y la fiscal federal del caso, Cecilia Incardona, analicen todo lo secuestrado en los allanamientos que se hicieron en la causa.
En la causa se investiga un presunto lavado de dinero de parte de Sur Finanzas, una empresa que en los últimos años estuvo muy vinculada al fútbol. Fue sponsor y financió a distintas entidades. Todo por su relación cercana con el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia.
Todas las sucursales de Sur Finanzas fueron allanadas el 1° de diciembre junto con el club Banfield y oficinas vinculadas a un fideicomiso. La fiscal Incardona había pedido secuestrar el celular de Vallejo. Ese día el empresario no fue encontrado. A la mañana siguiente se presentó en la Justicia. Dejó su celular y el de su madre junto con la clave de cada uno y prendidos.
La Justicia congeló todas las cuentas de la empresa y levantó el secreto fiscal, bancario y bursátil de los involucrados. Luego fueron allanadas las dos sedes de la AFA, de la Superliga y de 18 clubes de fútbol que tuvieron relación con Sur Finanzas, entre ellos Independiente, Racing, San Lorenzo, Barracas Central -de “Chiqui” Tapia-, Platense, Argentinos Juniors, Temperley, entre otros de varias categorías profesionales.
La causa judicial tiene otros celulares que también se ordenaron abrir. Son los que secuestraron cuando la semana pasada fue detenida la tesorera de Sur Fianzas, Micaela Sánchez, junto con dos choferes y portavalores -Sergio Da Silveira y Juan Cervín- en un depósito de la localidad de Turdera, donde había documentación de la empresa y ellos sacaban computadoras.
La Justicia los acusó del delito de encubrimiento y están presos por entorpecimiento de la causa judicial. “La única respuesta que tengo a todo lo sucedido es la siguiente: yo me encontraba abocada a no perder mi puesto de trabajo y, entonces, a que la empresa continúe funcionando”, dijo Sánchez en una presentación por escrito cuando volvió a ser indagada.
“Nunca quise ocultar o destruir pruebas”, sostuvo en otro tramo. A la mujer como a los choferes les ofrecieron ser arrepentidos. La expectativa es que la semana que viene el juez Armella resuelva si los procesa y si los mantiene detenidos o les otorga la prisión domiciliaria como solicitaron.
Fuente: www.clarin.com



