Sora 2, al detalle: cómo usar la polémica app viral de OpenAI que permite poner tu cara en cualquier video

OpenAI volvió a sacudir internet días atrás con el lanzamiento de Sora 2, su modelo más avanzado de generación de video, junto con una aplicación social al estilo de TikTok que permitirá a los usuarios agregarse ellos mismos a escenas creadas por inteligencia artificial (IA).
En menos de 24 horas se convirtió en la más descargada de la App Store en la categoría Foto y Video; pero en ese mismo vértigo comenzaron las polémicas por copyright y deepfakes.
La compañía que comanda Sam Altman describió este lanzamiento como “un gran avance en la IA para crear escenas de video más realistas”. Y la propuesta es tan simple como impactante: escribir una frase y verla convertida en un clip hiperrealista de hasta diez segundos. Uno más sorprendente que otro, y todo generado por IA.
“Sora 2 puede ahora hacer cosas que eran excepcionalmente difíciles, y en algunos casos completamente imposibles para modelos anteriores de generación de video”, dijo OpenAI al dar ejemplos como rutinas de gimnasia olímpica o movimientos de básquet.
La aplicación es la evolución del modelo de video que OpenAI lanzó en 2024 y es la última movida en la carrera de la industria de la IA, que comenzó con el lanzamiento de ChatGPT en 2022.
A diferencia de su primera versión, ahora puede simular leyes físicas con mayor realismo, mantener objetos entre escenas y generar audio completo: diálogos, efectos y ambientes sonoros.
🚀 Found a permanent invite code for Sora 2.
Like, repost, and comment “SORA” to get it.
(Must be following)Code will be sent to everyone.#Sora2 pic.twitter.com/EgYY3WgrZ9
— Jon Snow (@snowinjon) October 2, 2025
Un detalle clave es la interactividad. El usuario no solo da una instrucción escrita (“un vikingo en medio de una tormenta de nieve”), también puede grabar su cara y voz para protagonizar el clip. La aplicación crea una representación digital que se inserta en cualquier escena, lista para ser compartida.
La app funciona como una red social de videos cortos, con navegación vertical al estilo TikTok y un feed de recomendaciones personalizable. Los usuarios pueden sumar “me gusta”, comentar o remezclar creaciones de otros, pero el verdadero diferencial está en los cameos: tras una breve verificación de rostro y voz, cualquiera puede insertarse a sí mismo o a sus amigos en escenas generadas por IA.
It’s over !!, #Sora2 on ad concepts… it absolutely slaps hard 🤯🔥🎥
A real game changer for creative advertising. pic.twitter.com/lzVXf1oMJ1— Pierrick Chevallier | IA (@CharaspowerAI) October 1, 2025
Por ahora, Sora 2 solo se puede descargar en Estados Unidos y Canadá para iPhone. Sin embargo, hay formas de acceder desde otros países:
Con iPhone, basta con crear un Apple ID de Estados Unidos o Canadá, descargar la app y luego volver a la cuenta original. No hace falta VPN, aunque sí un código de invitación, que circula en redes y en Discord oficial de OpenAI.
En la versión web (sora.com), sí es obligatorio usar una VPN para simular una conexión desde Norteamérica. También en este caso se requiere invitación.
Fighting pandas in the Google office – #SORA2 pic.twitter.com/5iVS830m0a
— Barry Schwartz (@rustybrick) October 1, 2025
En apenas horas, internet se llenó de escenas de todo tipo: Sam Altman cantando en un baño, James Bond interpretado por Altman en una partida de póker, Pikachu dando cursos de cocina, Mario saltando de su mundo virtual a la vida real o Ronald McDonald envuelto en una persecución policial. Por eso, la discusión legal ya está en marcha.
OpenAI enfrenta demandas por supuestas infracciones de derechos de autor, entre ellas la presentada por The New York Times y varios autores de renombre. Los críticos señalan que el modelo se entrenó con material protegido y que ahora genera resultados que recrean personajes, franquicias y celebridades sin autorización.
#Sora2 に存在しない映画のオープニングムービーを作らせるのが面白すぎる。 pic.twitter.com/dstLd3Y26a
— IT navi (@itnavi2022) October 1, 2025
Además, el potencial de deepfakes preocupa. Uno de los videos más compartidos mostraba al propio Sam Altman robando componentes de una tienda, un ejemplo de cómo es posible retratar a personas reales cometiendo delitos inexistentes.
A todo esto, OpenAI asegura que todos los videos incluyen marcas de agua visibles e invisibles -todos los creados lucen un Sora 2- y metadatos para indicar su procedencia, aunque admite que estas señales pueden eliminarse fácilmente al subirlos a redes sociales.
Expertos como Siwei Lyu, director del Laboratorio Forense de Medios de la Universidad de Buffalo, advierten que ninguna técnica es infalible y que se necesitan múltiples capas de autenticación.
Por otro lado, en la generación de video, la plataforma se enfrenta a una dura competencia de Google, Runway AI y Midjourney, que ofrecen aplicaciones capaces de producir clips cortos en segundos.
Fuente: www.clarin.com