¿Qué es el Krampus? La leyenda de un despiadado “Grinch” del siglo XII que se convirtió en tradición

La Navidad en Europa no siempre estuvo asociada a regalos, luces de colores, mercado y celebraciones familiares. Durante siglos, diciembre fue un mes duro, marcado por el frío, la escasez y el aislamiento de muchas comunidades.
En ese contexto, surgieron relatos que buscaban ordenar la vida cotidiana y, sobre todo, el comportamiento de los más pequeños.
Mucho antes de que existiera Papá Noel, en regiones alpinas de Europa central circulaba una tradición particular vinculada a la llegada de San Nicolás, el obispo cristiano del siglo IV asociado a la caridad y la entrega de regalos. Pero junto a él venía otro personaje, su antagonista.
Ese personaje era Krampus. Una figura del folclore local que, lejos de repartir regalos, encarnaba el castigo. Su historia se trasmitió por generaciones como parte de una Navidad menos agradable.
Básicamente era el Grinch del siglo XII, pero más despiadado…
¿Qué cuenta la leyenda?
Según la tradición, a principios de diciembre, San Nicolás recorría los pueblos para premiar con frutas, golosinas y pequeños presentes a los niños que se habían portado bien durante el año. Era un obispo cristiano del siglo IV, que inspiró a la figura de Papá Noel.
San Nicolás fue el obispo del siglo IV que inspiró aPapá Noel o Santa Claus. Foto: Pinterest @kimcascio. La leyenda cuenta que en vísperas de su llegada lo acompañaba Krampus, la criatura encargada de ocuparse de los desobedientes. Mientras San Nicolás observaba y recompensaba, Krampus aplicaba castigo.
Se lo describía como una figura mitad demonio, mitad cabra, con cuernos, pelaje oscuro, una lengua larga, cadenas y una vara de abedul.
Las cadenas anunciaban su llegada; la vara servía para golpear (simbólicamente), también llevaba un bolso que era para llevarse a los chicos que se habían portado excesivamente mal.
No había advertencias ni segundas oportunidades. La evaluación ya estaba hecha y definía si cada niño merecía premio o castigo.
En qué contexto nació esta historia
La figura del Krampus se consolida en Europa central durante la edad media, especialmente en los siglos XII y XV, en regiones alpinas de la actual Austria y el sur de Alemania.
En ese momento, el invierno no era una estación más: el frío era extremo, había escasez de alimento, los días eran demasiado cortos y las comunidades pequeñas y rurales pasaban meses en aislamiento.
Ilustración de 1800 donde el Krampus agarra a un niño en primer plano. Foto: Wikipedia. En ese contexto, el comportamiento individual tenía impacto colectivo. Desobedecer, alejarse solo o no respetar las reglas básicas podía terminar en accidentes, pérdidas o incluso muertes.
Por eso, muchas tradiciones y relatos del folclore medieval no estaban pensados para entretener, sino para transmitir los límites, principalmente a los más chicos.
El Krampus como parte del sistema cultural, reúne elementos asociados al peligro: lo animal, lo salvaje, el bosque, el castigo físico y la desaparición. No representa un demonio religioso, ni el mal abstracto, sino la consecuencia de romper las reglas.
Krampuslauf: cómo se reinventó el monstruo navideño
Con el paso del tiempo, la historia del Krampus dejó de circular solo en relatos. En varias regiones de Austria y Alemania, la noche del 5 de diciembre se convirtió en el Krampuslauf, una marcha nocturna en la que jóvenes (y no tanto) se disfrazan de Krampus y recorren las calles con máscaras, cuernos, pieles, cadenas y campanas.
El ritual no nació como un espectáculo sino que, en realidad, durante siglos fue una expresión comunitaria relacionada al calendario invernal: hacer ruido, compartir en el espacio público y representar al castigo como forma de liberar tensiones antes de la llegada de la estación más difícil del año.
La gente se disfraza de Krampus, la interpretación más terrorífica es la mejor. Foto: Archivo. En la actualidad, el Krampuslauf sigue celebrándose cada diciembre, con algunos cambios. En algunos pueblos conserva su carácter original de ritual, mientras que en otros, se volvió un evento organizado, con recorridos pautados, publico y presencia turística.
Al mismo tiempo, el Krampus salió del folclore europeo y entró a la cultura cinematográfica: películas como “Krampus” u otras cintas donde tiene pequeñas apariciones o menciones, lo reintrodujeron como un ícono de terror navideño.
Así la criatura que nació en la cultura medieval para establecer reglas, terminó convertido en parte de la cultura popular moderna como desfile, espectáculo y ficción, sin perder del todo su sentido original.
Fuente: www.clarin.com



