Qué es “Buenas noches, Cenicienta”, el peligroso método usado en fiestas para robar y abusar a las víctimas


Un golpe conocido como Boa Noite, Cinderella –o “Buenas noches, Cenicienta”– está generando alerta entre viajeros y jóvenes en bares y fiestas, especialmente en Brasil donde varias personas ya fueron victimas.
Aunque no se trata de una sustancia única, este término describe una técnica en la que se mezclan medicamentos o sedantes disueltos en bebidas para dejar a la persona confundida o sin conocimiento.
La víctima queda con apariencia de ebria o somnolienta, sin conciencia de lo que sucede; el propósito casi siempre es el mismo: robar, abusar o aprovecharse de una persona bajo los efectos de una droga que no eligió consumir.
En 2016, esta técnica ya había sido motivo de alerta para las embajadas extranjeras, junto con el virus del Zika y la violencia, en vísperas de los Juegos Olímpicos de Río.
En ese entonces, el consulado advirtió que el método incluía una “sustancia que se disuelve en las bebidas y provoca confusión e incluso pérdida de conocimiento“.
El término hace referencia al cuento de Cenicienta, la joven que debía abandonar el baile a medianoche y perdía su zapato de cristal. En este contexto, el “buenas noches” es la droga y la “Cenicienta” es la víctima, que pierde su conciencia, sus pertenencias y su memoria.
La técnica consiste en colocar sustancias como Rohypnol, GHB o ketamina en la bebida de una persona distraída, aunque también pueden utilizarse otros estupefacientes. Al combinarse con alcohol, los efectos se potencian y la persona queda completamente indefensa.
Estas drogas son incoloras, insípidas e inodoras, lo que facilita que pasen desapercibidas. En pocos minutos, la víctima puede entrar en un estado de somnolencia profunda, confusión o incluso pérdida total del conocimiento.
A diferencia de lo que muchos creen, “Buenas noches, Cenicienta” no es una droga en sí, sino un método delictivo que utiliza distintas sustancias con fines criminales.
Los médicos explican que los efectos aparecen a los pocos minutos y pueden incluir pérdida de coordinación, habla incoherente, somnolencia extrema y amnesia parcial o total.
Por eso, en muchos casos, las víctimas solo se dan cuenta de lo ocurrido horas o incluso días después, al despertar sin recuerdos y sin sus pertenencias.
Esta semana, el influencer canadiense Cameron Golinsky, de 35 años, se convirtió en una de las víctimas más recientes de este método en Río de Janeiro.
Según relató en su cuenta de Instagram, aceptó una cerveza de dos desconocidos en un bar de Ipanema y luego perdió el conocimiento.
Golinsky despertó dos días después en su departamento, sin dinero, sin teléfono y con sus cuentas digitales invadidas. “Usaron una droga para noquearme, robaron todo mi dinero y mi teléfono, y la evidencia sugiere que fui agredido sexualmente. Me desperté dos días después, desnudo en mi habitación, sintiendo como si me hubiera atropellado un colectivo”, escribió.
Los expertos recomiendan no aceptar bebidas de desconocidos, no perder de vista el vaso y mantenerse siempre acompañado por personas de confianza.
En caso de sospecha, es fundamental buscar ayuda médica de inmediato, conservar la mayor calma posible y denunciar el hecho para que se realicen los exámenes toxicológicos.
Fuente: www.clarin.com



