pidió rotación de poder para poner fin a la guerra interna en el PJ

La solución llega luego de meses de incertidumbre marcados por fallos judiciales que pospusieron el proceso eleccionario interno y mantuvieron en vigor la intervención extendida. La nueva fórmula aprobada contempla la presidencia compartida entre Carolina Moisés, representante del peronismo federal, y Leila Chaher, referente de La Cámpora, en periodos de dos años cada una, dentro del mandato de cuatro años que abarca del 2025 al 2028.
La venia de Cristina y el fin de las internas
Desde su residencia en El Calafate, donde pasará las fiestas junto a su familia, Cristina Kirchner dio el visto bueno a este esquema de rotación. La decisión ya fue transmitida a los interventores actuales, Gustavo Menéndez, intendente de Merlo, y el exministro de Seguridad, Aníbal Fernández, quienes estuvieron al frente del PJ jujeño durante la intervención. Solo resta la firma de conformidad de los sectores liderados por Moisés y Chaher para oficializar el acuerdo.
El consenso implica no solo la alternancia en la presidencia, sino también una distribución equitativa de cargos en secretarías, consejerías y congresales entre todos los sectores del PJ provincial, incluidos los que quedaron fuera de la disputa directa, como el liderado por el abogado Dingui Martín Palmieri.
Una estrategia con miras al año electoral
La fecha no es casual. Jujuy desdoblará sus comicios provinciales en mayo, lo que marca el inicio del calendario electoral 2025. En paralelo, Corrientes, la otra provincia con el PJ intervenido, se prepara para elecciones a gobernador. Según analistas políticos, ambos procesos serán clave para medir el panorama electoral del peronismo a nivel nacional.
El acuerdo en Jujuy busca no solo garantizar la unidad partidaria, sino también posicionar al PJ como una fuerza competitiva en un escenario dominado por el oficialismo provincial liderado por el gobernador Carlos Sadir, y partidariamente por el ex mandatario Gerardo Morales.
La intervención: una etapa que llega a su fin
El PJ de Jujuy está intervenido desde hace un año y medio, enfrentando divisiones internas que llevaron a la justicia electoral a habilitar solo dos listas en la última etapa del proceso: una encabezada por Carolina Moisés y otra por Leila Chaher. La tercera lista, liderada por Martín Palmieri y vinculada al gobernador riojano Ricardo Quintela, quedó fuera de la contienda.
El interventor Menéndez propuso, en acuerdo con Cristina Kirchner, una solución salomónica: una lista de unidad con un esquema de rotación en la presidencia y reparto proporcional de cargos partidarios. Esto no solo evita la elección interna prevista para marzo de 2025, sino que también permite renovar todas las autoridades y dar por concluida la intervención.
Un modelo que busca replicarse
Cristina Kirchner sigue de cerca los procesos de normalización del PJ en las provincias intervenidas. Su intención es que tanto Jujuy como Corrientes comiencen el año electoral con estructuras dirigenciales renovadas. Este modelo de rotación y consenso podría convertirse en un esquema replicable para resolver conflictos internos en otras provincias.
Mientras tanto, el PJ jujeño se prepara para transitar esta nueva etapa con el desafío de consolidar su unidad y fortalecerse de cara a las elecciones provinciales, donde buscará recuperar protagonismo en un territorio políticamente complejo.
Fuente: www.lavozdejujuy.com