Jugaba al golf con su hijo, un árbol se les cayó encima y los mató

Un padre y su hijo murieron después de que un árbol les cayera encima durante una tormenta.

Matthew Terrell Collins, de 58 años, y su hijo, Matthew Terrell Collins Jr., de 29, estaban en un campo de golf el domingo 6 de abril cuando el árbol cayó y los aplastó. La dramática situación ocurrió en Georgia, en el sureste de Estados Unidos.

La pareja se encontraba en su carrito de golf cuando el mal tiempo azotó la región, lo que obligó a un padre y su hijo a buscar refugio bajo un árbol.

Buddy Bryan, el forense, contó que ambos murieron “instantáneamente” por un traumatismo contundente provocado por un aplastamiento.

“Es extremadamente raro que un árbol aplaste a alguien de esa manera… Sabíamos que se acercaban tormentas y estaba pronosticado para ese día, pero esta apareció de repente. Fue una llovizna y en un minuto se volvió extremadamente violenta”, explicó el forense Bryan.

“Estaban pasando tiempo juntos cuando llegó la tormenta, compartiendo un momento entre padre e hijo que, sin saberlo, se convertiría en el último”, escribió el organizador del evento.

El gobernador de Georgia, Brian Kemp, habló después de enterarse de la muerte de los dos hombres.

“Marty, las chicas y yo estamos consternados por la trágica muerte de dos georgianos en el condado de Muscogee hoy a causa del mal tiempo”, publicó Kemp en X el domingo. “Les pedimos que nos acompañen en nuestros pensamientos y oraciones, junto con todos los que están respondiendo a los daños causados ​​por la tormenta”.

Marty, the girls, and I are saddened by the tragic deaths of two Georgians in Muscogee County today as a result of the severe weather. We ask that you join us in keeping their loved ones in our thoughts and prayers, along with all those responding to storm damage. https://t.co/POfQuvswD0

— Governor Brian P. Kemp (@GovKemp) April 6, 2025

Ante una tormenta al aire libre, los especialistas recomiendan no refugiarse debajo de los árboles o en estructuras metálicas. Sugieren colocarse en cuclillas con la cabeza gacha y taparse los oídos.

Si es posible, también hay que buscar alguna depresión en el terreno para esconderse allí y mantenerse alejado de objetos altos.