Fuerte interna entre La Libertad Avanza y el PRO: la amenaza que disparó la salida de 1.000 fiscales y la foto que prepara Macri con los propios


Un polvorín está siendo la previa de la elección en la provincia de Buenos Aires para la alianza que cerraron el PRO y La Libertad Avanza, con acusaciones cruzadas por cómo se va a fiscalizar el comicio y la decisión del macrismo de quitar a 1.000 fiscales.

La ruptura se da a cuatro días de la elección en el distrito más fuerte en términos de padrón de toda la provincia de Buenos Aires, en el que en las legislativas de septiembre el peronismo superó el 53% de los votos, 28 puntos más que la alianza libertaria (el doble de diferencia que a nivel provincial).

El detonante, según pudo reconstruir Clarín, fueron las amenazas que dirigentes del PRO recibieron de parte de dirigentes mileístas. Especialmente, una identificada a Alejandro Finocchiaro, principal referente del macrismo y candidato a renovar su banca como diputado nacional.

El apuntado es Luis “el Negro” Ontiveros, puntero libertario en el Conurbano, diputado provincial electo de LLA, coordinador en La Matanza y que responde a Sebastián Pareja. La autora de las amenazas contra Finocchiaro habría sido la mujer de Ontiveros.

Según relataron fuentes a Clarín, a un allegado a Finocchiaro le llegaron mensajes de audios de WhatsApp en los que se advertía que al ex ministro de Educación “se le va a terminar la joda”, que “lo único que le importa es el carguito de diputado” y que “nunca debió haber sido parte de La Libertad Avanza”.

“No queremos ser cómplices del desastre que haga esta gente con la fiscalización”, se despegan desde el PRO a partir de la medida que implica la quita de 1.000 fiscales en el distrito, respaldada por el presidente del partido, Mauricio Macri.

El argumento del partido amarillo es que los libertarios aseguran que pueden fiscalizar ellos por su cuenta, sin ningún tipo de ayuda en el distrito más populoso de toda la provincia de Buenos Aires.

“Si Ontiveros dice que él puede arreglarse solo, que lo haga. Nosotros llevaremos la gente a fiscalizar a otros municipios”, sostienen desde el PRO. La discusión se originó por quién se ocupaba de cubrir los circuitos electorales de La Matanza.

En el macrismo temen que se repita el escenario del 7 de septiembre, fecha en la que sostienen que se reportaron serias deficiencias en la fiscalización: ausencia de fiscales en centros de votación y falta de transparencia en el uso de los fondos.

En medio de las tensiones con los libertarios, Mauricio Macri dará una señal en las próximas horas en términos políticos, ya que reunirá a los candidatos del PRO en la provincia y en la ciudad de Buenos Aires.

El encuentro será sólo con dirigentes amarillos, marcando la clara distancia del ex presidente hacia el armado violeta. Por caso, Macri publicó en redes sociales un mensaje de respaldo a la candidatura de Fernando de Andreis, su delfín del PRO, que va como quinto candidato, omitiendo a Alejandro Fargosi, el primer candidato de esa lista, que debuta en esta elección.

En provincia de Buenos Aires, el PRO fue con apenas tres candidatos entre los primeros 12 dirigentes de la lista: Diego Santilli, Alejandro Finocchiaro y Florencia de Sensi.

La renuncia de José Luis Espert a ser cabeza de la lista, enmarcado en el escándalo por corrupción que lo involucra a un empresario con vínculos narco como Fred Machado, derivó en que Santilli pasara a ser la cabeza de la boleta.

El fastidio entre los amarillos apunta a que tuvieron que ponerse la campaña al hombro, con Santilli como principal referencia, y que aun ese contexto adverso, los libertarios siguieron tensando la relación en puntos clave como La Matanza.



Fuente: www.clarin.com

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