Francia e Italia piden mayor equilibrio en el acuerdo UE-Mercosur para proteger al sector agrícola
Francia e Italia reclamaron “un mayor equilibrio” en el acuerdo UE-Mercosur para proteger eficazmente al sector agrícola y “hacer cumplir la normativa sanitaria europea”.
Benjamin Haddad, Ministro Delegado francés para Europa, fue recibido en Roma por Tommaso Foti, Ministro italiano de Asuntos Europeos, Ordenación del Territorio y Políticas de Cohesión. La reunión brindó la oportunidad de debatir posibles maneras de “mejorar el acuerdo entre la UE y el Mercosur”, al que Francia ahora apoya pero con cambios.
“Francia e Italia reafirman su apoyo a un libre comercio justo y recíproco, así como a acuerdos comerciales sostenibles, que son motores esenciales del crecimiento, el acceso a los mercados y la influencia internacional de nuestras empresas” sostuvieron en el comunicado.
Sin embargo, “Italia y Francia consideran que, si bien ofrece beneficios, el actual acuerdo UE-Mercosur no protege adecuadamente a los agricultores europeos frente a los riesgos de perturbaciones del mercado ni garantiza la soberanía alimentaria del continente a largo plazo”.
Los ministros Haddad y Foti “comparten la necesidad de proteger mejor a nuestros agricultores y nuestras normativas sanitarias, incluso mediante la adopción de cláusulas específicas. El acuerdo UE-Mercosur debería garantizar mejor nuestros estándares sanitarios, ambientales y sociales, y asegurar la equidad entre productores que tanto deseamos”, sostuvieron en este comunicado conjunto.
Las cifras del Mercosur
La Unión Europea y los cuatro países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) alcanzaron un acuerdo político el 6 de diciembre de 2024 para un acuerdo de asociación pionero. Lleva más de 25 años de negociación.
La UE es el principal socio comercial y de inversión del Mercosur. Las exportaciones de la UE al Mercosur ascendieron a 56.000 millones de euros en bienes en 2023 y a 28.000 millones de euros en servicios en 2022.
La UE es el mayor inversor extranjero en el Mercosur, con un volumen de 340.000 millones de euros en 2021. Si bien la relación es muy sustancial, tanto los exportadores como los potenciales inversores se enfrentan a obstáculos en los mercados del Mercosur. El principal es la oposición de los agricultores franceses a aceptar sus carnes, los condicionamientos sanitarios y la competencia que representa.
El objetivo del nuevo acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur es:
-Incrementar el comercio y la inversión bilaterales y reducir las barreras comerciales arancelarias y no arancelarias, especialmente para las pequeñas y medianas empresas.
-Crear normas más estables y predecibles para el comercio y la inversión mediante normas mejores y más sólidas, por ejemplo, en materia de derechos de propiedad intelectual (incluidas las indicaciones geográficas), normas de seguridad alimentaria, competencia y buenas prácticas regulatorias.
-Promover valores comunes como el desarrollo sostenible, mediante el fortalecimiento de los derechos de los trabajadores, la lucha contra el cambio climático, el aumento de la protección del medio ambiente, el fomento de la responsabilidad empresarial y el cumplimiento de altos estándares de seguridad alimentaria.
La influencia de Lula
La reciente visita de estado del presidente brasileño Lula da Silva a Francia fue fundamental para que el presidente francés, Emmanuel Macron, cambiara de posición sobre el Mercosur y sus beneficios.
En medio de la creciente presión de la guerra comercial desatada por Estados Unidos, muchos en Francia empiezan a ver ventajas en el acuerdo UE-Mercosur, considerándolo una respuesta estratégica a la creciente incertidumbre económica.
La fuerte resistencia de Francia al acuerdo con Mercosur empieza a resquebrajarse, ante la preocupación por las posibles restricciones a las exportaciones de la UE a Estados Unidos.
“Los acuerdos comerciales existentes y futuros entre la UE y otras economías como Japón, Canadá o Mercosur podrían amortiguar la guerra de aranceles vinculados a la política comercial estadounidense”, dijo el gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, en su carta anual al presidente francés, Emmanuel Macron, el 9 de abril.
El ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, planteó la posibilidad de enmendar el acuerdo UE-Mercosur con cláusulas de salvaguarda y “frenos de urgencia” para evitar la desestabilización de sectores, como se ha hecho con Ucrania.
Para ayudar económicamente a Ucrania, desde el comienzo de la invasión rusa en 2022, la UE autorizó la entrada sin aranceles de productos agrícolas ucranianos. Pero luego , ante la inundación con esos productos de ciertos mercados, sobre todo en los países limítrofes, y el hundimiento de precios para los agricultores comunitarios, se establecieron ciertas limitaciones y contingentes.
Fuente: www.clarin.com
