Encuesta River: ¿quién debería reemplazar a Driussi contra Monterrey? :: Olé

Con el tiempo se sabrá si el gol de Sebastián Driussi a Urawa Red Diamonds en el debut en el Mundial de Clubes pasa a ser decisivo, acaso para definir una clasificación por diferencia de gol. Pero entrada la noche del martes en Seattle, ya madrugada argentina del miércoles, la sensación que invadió la torre Sur del hotel Westin, donde se hospeda el CARP, es que ese cabezazo a la red del Gordo para ponerse 2-0 ante los japoneses salió demasiado caro.
Allí, en la intimidad del bunker millonario, el Muñeco y su cuerpo técnico recibieron la confirmación de que la lesión en el tobillo izquierdo, un esguince severo del ligamento interno, dejará al ex Austin afuera de lo que resta del torneo. Es más: incluso lo pone en duda para la serie de octavos de final de la Copa Libertadores contra Libertad de Paraguay, con ida en Asunción el 14 de agosto y vuelta en Buenos Aires una semana después porque se estima que Driussi estará alrededor de dos meses out.
El delantero de de 29 años, en principio, tendrá que hacer tres semanas de reposo. Y previo rechequeo por imágenes de cómo está el ligamento, comenzará una recuperación que podría llegar a demandarle hasta un mes más, completando en total casi 60 días de inactividad. Esto, siempre y cuando en el medio no surjan complicaciones.
“Me rompí todo”, se le escuchó decir al #15 después de la caída al disputar la pelota con arquero nipón Shūsaku Nishikawa y antes de salir primero del campo en andas de Diego La Roca Moreno y luego del estadio en silla de ruedas en un tramo y en muletas, en otro. Fue probablemente el gol más doloroso de su carrera, o cuanto menos de los 34 que ya hizo con la Banda (siete desde su vuelta: es con Colidio y Mastantuono el goleador del 2025) en 128 partidos. Un gol doloroso, también, para todo River: Gallardo, así, se queda con muy pocas variantes en ofensiva más allá de Miguel Borja, su reemplazante en el mediodía de Seattle, cuyo rendimiento en este último tiempo representa poco menos que una moneda al aire.
Es que con Agustín Ruberto aún recuperándose de su rotura de ligamentos cruzados y el chileno Gonzalo Tapia decididamente fuera de consideración por bajo nivel, el CT se quedó sin otro #9 más allá del colombiano y de Bautista Dadín, el goleador de la Reserva que aún no suma minutos en Primera ni tiene contrato profesional.
Así, el panorama se nubló de repente de cara a una final como la que tiene el equipo en Los Ángeles pasado mañana ante Rayados, pero también hacia adelante: a la baja confirmada de Mastantuono cuando termine la participación de River en el Mundial se le suma la lesión de otra de las figuras del plantel, por la que el club pagó más de u$s 10.000.000, que puede extenderse a los playoffs de la Copa. Si en paralelo Gallardo ya buscaba delanteros en el mercado, ahora la necesidad tiene un carácter aún más urgente y expone la falta de variantes en ataque.
Aún así, suena a quimera que las negociaciones por un punta (Maxi Salas es el principal apuntado por el CT, que ya había buscado a Beltrán) puedan hacerse a tiempo como para que alguno se suba al avión e ingrese por la ventana (por la ventana, en muchos sentidos) que abre FIFA entre la fase de grupos y los eventuales octavos de final que arrancan el 28. En ese sentido, la variante que está más a mano es la de Adam Bareiro, que estuvo entrenándose los últimos días en Miami y técnicamente debe volver al club tras su préstamo en el Al Rayyan qatarí: no se advierte fácil, tampoco, ni tampoco una decisión del estilo Gallardo.
En todo caso, el Muñeco deberá pensar qué otras posibilidades ofensivas tiene más allá de Borja: adelantar y centralizar a Mastantuono para que sea un segundo punta al lado de Colidio, armar un 4-2-3-1 con el rubio como punta de lanza sumando un volante más, ubicar a Meza como extremo por izquierda y pasar a FC al medio y, por último, incluir en ese mismo formato a un Subiabre que todavía parece algo verde para el roce con esta clase de equipos.
Sí, el tobillo izquierdo de Driussi, hinchado como una pelota, ése en el que tiene al lado un tatuaje con el escudo de River, pone al CARP en aprietos. A recalcular.
¿Quién debería ocupar el lugar de Driussi ante Monterrey?
Fuente: www.ole.com.ar