El rey Carlos III conmovió con el relato sobre el cáncer que enfrentó y destacó “el preciado regalo de la esperanza“


La confirmación en febrero de 2024 del diagnóstico de cáncer de Carlos III, rey de Reino Unido, generó una gran conmoción. Ahora, aunque no se reveló qué tipo de tumor tuvo, el monarca dio un conmovedor mensaje. Su exposición, además, marcó una diferencia en la comunicación habitual de esta casa real.
Como retomó una nota de Vanitatis, el máximo representante de la nobleza británica apareció desde la Morning Room de la residencia real británica Clarence House en una grabación para gran noche televisiva de Stand Up To Cancer 2025.
La iniciativa es una acción conjunta de Cancer Research UK y Channel 4 que busca financiar investigación y acelerar el desarrollo de nuevos tratamientos.
Con una presencia serena y cargada de intención, confirmó que se encuentra en recuperación de la enfermedad.
Luego, fue mucho más allá e insistió en la importancia de los programas de detección precoz, algo que fue fundamental para las buenas perspectivas de la enfermedad.
La información conocida, tal como indica Vanitatis, es que su propio tumor fue detectado gracias a las pruebas posteriores a una intervención por un agrandamiento de próstata.
Este hallazgo lo obligó a iniciar un tratamiento semanal y a reducir temporalmente sus compromisos, sin llegar a desatender sus asuntos.
También aprovechó el mensaje para reflexionar sobre su experiencia. “Sé por experiencia propia que un diagnóstico de cáncer puede ser abrumador. Sin embargo, también sé que la detección temprana es clave para transformar el tratamiento, brindando un tiempo invaluable a los equipos médicos y, a sus pacientes, el preciado regalo de la esperanza”, concluyó.
Esta no es la primera vez que la familia real británica enfrenta un diagnóstico de cáncer. Kate Middleton, princesa de Gales y nuera de Carlos III, fue diagnosticada en febrero de 2024.
Un mes después, ella publicó un video muy íntimo y con un tono cercano en el cual contó que había atravesado una cirugía abdominal importante que inicialmente no se consideró cancerosa y que las pruebas posteriores revelaron la presencia de la enfermedad.
Reconoció que la noticia había sido un “gran shock” para ella y su familia y subrayó la importancia de tomarse tiempo para sanar, tanto física como emocionalmente. También brindó su apoyo a quienes están en la misma situación.
Desde ese momento, Kate tiene un gran compromiso por quienes se encuentran en tratamiento oncológico.
Una de las muestras, cuenta el sitio Hola, fue su visita al Ever After Garden de Londres, un espacio de recuerdo y solidaridad que recauda fondos para la Royal Marsden Cancer Charity y su fundación, de la que ella y su esposo, el príncipe Guillermo, son padrinos.
También reconoció el reto diario para “encontrar el equilibrio entre la rentabilidad y el impacto positivo”, recalcando que “ambos no son, ni deben ser, incompatibles”.
Fuente: www.clarin.com



