El botón ‘Dry’ del aire acondicionado que casi nadie usa y cambia por completo su rendimiento


Con la llegada del verano, el aire acondicionado vuelve a ser clave en casa, pero hay una función poco usada que puede mejorar el confort cuando hay mucha humedad y además ahorrar gasto de electricidad: el modo Dry.
Este ajuste, poco utilizado por los usuarios, está pensado para combatir uno de los factores que más influye en la sensación térmica: la humedad.
El botón Dry no está diseñado para enfriar, sino para deshumidificar. Al activarlo, el equipo trabaja a una potencia reducida y empieza a extraer la humedad del aire, acumulándola en forma de agua en la bandeja interna.
En ciudades donde el verano es pegajoso como Buenos Aires, Santa Fe, Corrientes o Misiones esa reducción del porcentaje de humedad puede modificar por completo la percepción del calor, incluso cuando la temperatura no es tan alta.
A diferencia del modo frío tradicional, el modo Dry funciona en ciclos más cortos y estables. Esto se traduce en un menor consumo eléctrico en ciertos equipos y condiciones (sobre todo sin inverter) que técnicos del sector calculan entre un 25% y un 40% menos.
Al bajar la humedad el ambiente se siente más fresco sin necesidad de forzar el termostato a valores muy bajos.
El uso del Dry es ideal para esos días en los que “el aire está pesado”, para noches lluviosas o tropicales en las que el frío excesivo resulta molesto, o para quienes necesitan mantener una temperatura moderada por motivos de salud.
Además, al reducir la humedad, también disminuye la aparición de hongos, evita que se empañen las ventanas y contribuye a que el equipo trabaje con menos esfuerzo.
El modo Dry puede convertirse en un aliado silencioso para atravesar los días húmedos sin sacrificar confort ni consumo. Se trata de una función que muchos tienen a mano y pocos usan, pero que puede marcar una gran diferencia en el rendimiento del aire acondicionado.
Fuente: www.clarin.com



