Dieta mediterránea cetogénica: adelgaza y mejora tu presión arterial sin pasar hambre

La nutrición es uno de los principales aspectos que debe tener en cuenta una persona si quiere estar bien de salud. Bajar de peso muchas veces es clave para tener un día a día más ameno y organizado.

Para poder bajar de peso existen una gran variedad de dietas. Sin embargo, hay dos que desde hace bastante tiempo que se pusieron de moda: la dieta mediterránea y la cetogénica.

La combinación entre la dieta mediterránea y la cetogénica saltó a la fama en el último tiempo porque promete resultados en peso y salud cardiovascular sin hambre excesiva.

Un estudio publicado en Nutrients sugiere que, en personas con sobrepeso u obesidad y presión arterial alta o en límite, ambas estrategias dietéticas ofrecen beneficios similares tras tres meses de seguimiento.

Treinta personas con peso elevado y presión “normal alta” o hipertensión leve fueron divididas al azar para avanzar en este estudio.

Fueron once las personas que siguieron la dieta mediterránea, mientras que quince optaron por seguir la dieta cetogénica durante tres meses.

Al finalizar, ambos grupos experimentaron:

Además, quienes siguieron la dieta cetogénica mostraron un efecto más marcado de “nocturnal dipping”: una caída saludable de la presión arterial durante el sueño, que se asocia con menor riesgo cardiovascular.

Si bien ambas dietas funcionan, hay algunos matices que las personas deberían considerar de acuerdo a los objetivos que tengan.

En síntesis, la dieta mediterránea cetogénica combina lo mejor de los dos mundos: te ayuda a adelgazar, mejorar la presión arterial y evitar el hambre constante.

Aunque ambas dietas mostraron eficacia, la dieta cetogénica podría ofrecer una ventaja adicional durante el descanso nocturno.

Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que el estudio fue limitado en participantes y duración. Como advierte Chen, “se necesitan investigaciones más amplias y diversas para confirmar estos hallazgos y evaluar beneficios a nivel clínico”.

Es importante aclarar que todos los especialistas sostuvieron que es recomendable consultar con un profesional antes de iniciar una dieta restrictiva.