De marginado a leyenda inquietante: quién fue Tiny Tim, la voz que domina los videos de terror en TikTok

Tiny Tim no nació raro, lo hicieron raro. Llegó al mundo en 1932, en Nueva York, y su nombre era Herbert Boutros-Khaury. Creció como un chico aislado que sufría bullying en los recreos y utilizaba la música como refugio; que se encerraba en su habitación a escuchar los discos en su primer formato de 78 RPM.

Cuando comenzó la secundaria, su padre le regaló un tocadiscos y ahí descubrió a los cronistas musicales de principio del siglo XX. No tenía amigos, tampoco los necesitaba. Toda la compañía provenía de viejas melodías que le garantizaban paz mental.

Una madrugada, aseguró que Jesús se le apareció Según él, le dio una instrucción clara que definiría su carrera: cantar en falsete -una técnica vocal para alcanzar notas agudas-. Esta “aparición divina” fue la clave para volverse famoso.

Herbert tenía claro que la educación convencional no era lo suyo. A principios de los 50 comenzó a trabajar como mensajero en los estudios de Metro Golden Mayer, pero su objetivo real era cantar.

Probó tocar varios instrumentos -como la guitarra, el violín y la mandolina-, hasta descubrir el ukelele de plástico que lo acompañó hasta su último día.

Se pintó el rostro color blanco, usaba el pelo largo y tenía un estilo que podría definirse como “naive”. Tim empezó cantando en concursos juveniles de talento, hasta que consiguió su primer trabajo estable en un local de lesbianas de Greenwich Village.

Allí cantaba seis horas diarias, seis veces por semana, mientras también se presentaba en fiestas, clubes nocturnos y shows de principiantes cada vez que podía.

A esta altura ya no era Herbert, sino Tiny Tim, inspirado en el niño enfermo del cuento de Charles Dickens.

En febrero de 1968 tuvo una aparición en Rowan & Martin´s Laugh-In, una famosa comedia televisiva estadounidense, cambió todo. Mientras cantaba, en los zócalos, los editores escribieron: “Lassie is a boy” (Lassie -el perro- es varón), para burlarse de su voz. Esta escena fue bullying televisado, pero también lo catapultó a la fama.

La relación con el público era medio morbosa, no lo entendían, no sabía qué estaba mirando y, por eso, no podían dejar de verlo.

Su versión de Tiptoe Through the Tulips se volvió su carta de presentación. Impactó por lo agudo, lo exagerado y la sensación que generaba.

Entre 1968 y 1969 su figura explotó. Grabó “God Bless Tiny Tim” (Dios bendiga a Tiny Tim), apareció en múltiples programas y hasta tocó en Woodstock. En su repertorio incluía canciones infantiles y melodías de los años 20 y 30, que trataba como piezas históricas.

Su voz grave, cuando la mostraba, demostraba que técnica tenía; pero la industria prefería el falsete, que vendía más.

En 1969 se casó con Miss Vicky en The Tonight Show. Hoy sería imposible: él tenía 37 años y ella era una adolescente de sólo 17. Más de 40 millones de personas vieron la ceremonia. El matrimonio duró poco: alguien pasó bajo la puerta un sobre con fotos íntimas de ella, que luego terminaron en una revista.

El vínculo se rompió y Tiny Tim nunca superó la exposición del escándalo.

A pesar de la decepción amorosa, volvió a casarse dos veces más. Siguió cantando. Siguió viajando por bares y clubes cada vez más chicos. En los 80 incluso interpretó a un payaso siniestro en una película de terror de clase B.

En los 90 su salud estaba en estado crítico; padecía hipertensión, sobrepeso y diabetes. Los médicos le ordenaron dejar de actuar pero él no lo hizo. Su identidad estaba tan atada al escenario que prefería arriesgar su vida antes que retirarse.

En septiembre de 1996, durante un festival de ukelele, sus ojos se pusieron blancos y cayó hacia delante sin soltar el instrumento. Estuvo internado durante tres semanas. Pudo recuperarse pero no modificó su conducta, siguió aceptando shows.

Su último concierto fue en noviembre de 1996 en Minneapolis. Cantó las primeras líneas de Tiptoe Through the Tulips, frenó y le dijo a su esposa, Sue, que no se sentía bien. Se desplomó y murió en el hospital horas después.

Décadas después de su muerte, Tiny Tim circula más por los algoritmos que por los amantes de la música. Tiptoe Through the Tulips aparece en videos que buscan generar incomodidad: clips en blanco y negro, filtros tétricos y relatos que rozan el terror o lo paranormal.

En Tiktok, su imagen se resume a un par de segundos de falsete y a un sonido que se interpreta como perturbador, pero nadie sabe quién está detrás de esa voz.

Un músico obsesionado con canciones antiguas terminó como una referencia del terror en redes sociales. Mientras las personas quizá se preguntan la historia detrás de la canción y ese sonido, su voz sigue apareciendo como complemento perfecto de lo bizarro, algo que quizá necesita más explicación de lo que se exige y circula en los algoritmos.