Cinco señales que avisan cuando tu suelo pélvico pide ayuda

El suelo pélvico es el conjunto de músculos y tejidos que sostienen vejiga, útero, vagina y recto. Cuando pierde fuerza o coordinación, aparecen síntomas que muchas veces se normalizan.

Esta musculatura responde a factores como embarazo, parto vaginal, menopausia, deportes de impacto, tos crónica o levantar cargas. También influyen el estreñimiento, el sobrepeso y los cambios hormonales.

Identificar señales de suelo pélvico debilitado permite actuar antes de que el cuadro avance. La consulta temprana con fisioterapia especializada reduce tiempos de tratamiento y previene recaídas.

En ese proceso, suman los ejercicios para el suelo pélvico guiados por profesionales y hábitos que disminuyen la presión intraabdominal.

Hábitos útiles: buena hidratación, fibra en la dieta para evitar pujo, higiene postural y pausas activas. Entrenar fuerza con técnica y progresión cuida el soporte muscular global.