Arranca el juicio contra un hombre que intentó robar un auto asignado al presidente de la Corte

El Tribunal Oral Federal 2 (TOF 2) comenzará este lunes a las 9.30 el juicio contra Damián Berruet, el hombre que intentó robar el vehículo perteneciente al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Horacio Rosatti. El debate que será unipersonal y estiman, concluirá en dos semanas, tendrá la intervención del fiscal general Diego Luciani. Es el funcionario judicial que se hizo conocido por su alegato contra Cristina Kirchner en el caso Vialidad.
Las audiencias serán en la sala “A” de Comodoro Py, y además de Luciani estará a cargo el juez Néstor Costabel. El episodio ocurrió el 30 de mayo del año pasado, cuando Berruet intentó ingresar al vehículo asignado al presidente del máximo tribunal.
El delito por el que se lo acusa es el de robo en grado de tentativa, agravado por “tratarse de un vehículo que se hallaba en la vía pública, por el que deberá responder en calidad de autor”.
El caso fue instruido por el fiscal federal Franco Picardi. Cuando se elevó el caso a juicio oral, el requerimiento de instrucción sostenía que el Ministerio Público Fiscal dio por acreditado que Damián Berruet, “el 30 de mayo de 2024, aproximadamente a las 13:40 horas, intentó apoderarse ilegítimamente del vehículo marca Toyota modelo SW4 de color blanco, que se encontraba estacionado en la calle Uruguay entre los Nros. 581 y 549 de esta Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
“Conforme se pudo acreditar, el imputado intentó abrir el vehículo mediante el uso de un destornillador, y mientras realizaba dicha conducta su actividad fue interrumpida por el accionar del suboficial auxiliar Cristian Adrián Ferreiros, funcionario de la División Corte Suprema de Justicia de la Nación de la Policía Federal Argentina”, se detalló en el requerimiento de elevación a juicio.
Fuentes judiciales indicaron a Clarín que uno de los datos más llamativos del caso “es que se buscaba algo en particular del vehículo, no sólo se intuye que de antemano sabía que se dirigía al auto del presidente de la Corte sino que buscaba un maletín”.
Más allá de la tentativa de robo que conduce a Berruet al banquillo de los acusados, la justicia busca avanzar y determinar si había alguien por encima de este hombre que lo instruyó en el delito cometido.
De hecho, en etapa de instrucción aún se encuentra un expediente donde se investiga la asignación de líneas telefónicas -sin que las haya solicitado- a Horacio Rosatti y otros sucesos irregulares que involucran a los demás integrantes de la Corte Suprema de Justicia.
Cuando se detalló el hecho que se debatirá en el juicio unipersonal, se determinó que Berruet “intentó darse a la fuga, situación que dio inicio a una persecución a pie que culminó a las pocas cuadras con su aprehensión por parte de las oficiales Fiamma Belén Wagner y Nataly Quimey Hilt”
Al momento de su detención, manifestó falsamente ser y llamarse Franco Daniel Molina. De forma inmediata se corroboró que los datos eran apócrifos y cuando se lo requisó, determinaron que tenía en su posesión de un equipo de radio tipo handy “configurado especialmente para funcionar como inhibidor de señal de llaves de automotores y de una llave tipo allen con su punta limada”.
Durante la instrucción se logró demostrar que “Berruet se domiciliaba en la provincia de Córdoba y concurría asiduamente a esta Ciudad a cometer delitos, posiblemente con otras personas; y que el hecho delictivo quedó registrado en video”.
De campera negra, pantalón oscuro y zapatillas marrones, Berruet ese día estaba con una mochila gris y negra. El registro fílmico lo muestra acercándose a la camioneta Toyota SW4. Después se detalló la secuencia: “Se mete entre dos vehículos: ka Toyota SW4 blanca con matrícula AE026UF y una de similares características en color negro, sube a la vereda, da media vuelta mientras parece tomar algo entre sus manos y regresa hacia la puerta del conductor de la camioneta asignada al Dr. Rosatti. En ese momento, la maniobra es advertida por el Suboficial Auxiliar Cristian Ferreiros”, quien interviene de inmediato.
Berruet formaba parte de un grupo dedicado a cometer robos y hurtos sin mucha complejidad en Capital Federal, según determinó la investigación del caso. “Su nivel de organización sería medio, teniendo en cuenta que en los últimos dos meses estarían realizando viajes a la Ciudad de Buenos Aires con duración de dos o tres días, donde podrían cometer diferentes ilícitos y luego volver a su provincia. Ese tiempo fuera, les permite dificultar el rastreo de su autoría y también apreciar las repercusiones del caso”.
Fuente: www.clarin.com