La brutal paliza a “Manchita”, preso por circular en una moto robada, que terminó con dos guardias con perpetua


Dos agentes penitenciarios que golpearon hasta la muerte a un joven en una unidad penal de Corrientes fueron condenados a prisión perpetua. Los jueces dispusieron además rectificar el acta de defunción para que figure que Héctor “Manchita” García (20) falleció “por tortura“.
El fallo recayó sobre Héctor Ortiz y a Víctor Molina, quienes llegaron a juicio detenidos, mientras que otros seis penitenciarios fueron absueltos.
Es que el Tribunal de Juicio N° 1 de Corrientes, integrado por Ana del Carmen Figueredo, Darío Alejandro Ortiz y María Mercedes Leconte, consideró, a instancias de la fiscalía de juicio, que no había pruebas suficientes para condenar a Ramón Gómez, Ricardo Páez, Marcelo Alegre, Rubén Camaño Castillo, Francisco Gómez y Lucas González, quienes ya habían sido beneficiados con la excarcelación.
Al momento de los alegatos, todas las expectativas estaban puestas en la postura que adoptaría el fiscal Carlos Lértora, quien había pedido la nulidad del juicio por considerar que la fiscal de Instrucción no había establecido con claridad los roles de los ocho acusados.
Incluso dijo que no estaba en condiciones de acusar, motivo por el cual la querella pidió su apartamiento, lo cual fue rechazado por los jueces.
Finalmente Lértora acusó a Ortiz y Molina, pero consideró que no se había logrado probar que el resto de los penitenciarios haya tenido algún tipo de participación en el hecho.
Por su parte, el abogado Hermindo González, quien representa a la familia de la víctima, pidió que esos seis acusados recibieran una pena de 15 años de prisión.
También se pronunciaron por una condena los abogados Sofía Domínguez Bricenio y Jorge Isetta, miembros del Comité de Prevención de la Tortura de Corrientes.
En octubre de 2021, García, a quien le decían “Manchita” por una marca de nacimiento en la cara, estaba detenido en la Unidad Penal 6 “San Cayetano”, acusado de circular en una moto robada.
El joven ya había tenido algunos cruces con los guardias que custodiaban el pabellón donde estaba alojado.
Ese día se produjo un nuevo incidente. En base a las cámaras de seguridad del lugar, se pudo establecer que Ortiz y Molina lo sacaron esposado de pies y manos, y lo llevaron a un sector de admisión conocido como “la privadita”.
En ese lugar, “Manchita” fue sometido a una feroz paliza. Los golpes cesaron cuando el interno quedó tendido en el suelo, inconsciente.
En ese momento, los penitenciarios pidieron la asistencia de un enfermero del penal, tras lo cual, llegó la médica Ramona Alfonso, quien tuvo que insistir para que le quitaran las esposas a García.
La médica constató que su pulso era débil, lo administró un medicamento y decidió su derivación a un hospital, lo que se demoró porque tuvieron que esperar el arribo de un patrullero.
“Manchita” no sobrevivió y la autopsia determinó que la muerte fue producto de un paro cardiorrespiratorio provocado por un severo traumatismo encefalocraneano y una golpiza en todo el cuerpo.
Según el abogado González, las imágenes de las cámaras de seguridad permitieron reconstruir parte de la secuencia de los hechos: “García es reducido en perfecto estado de salud, trasladado caminando a un sector denominado ‘box’ y sale de allí 40 minutos después, sin signos vitales”, debido a “una paliza salvaje.”
En tanto, el tribunal anunció que los fundamentos del fallo se conocerán una vez concluida la feria judicial.
Fuente: www.clarin.com



