Salió a pasear con su perro y el can descubrió una punta de lanza de más de 1700 años de antigüedad


En medio de una caminata que parecía habitual, se produjo un hallazgo histórico. Un perro encontró una punta de lanza de miles de años de antigüedad mientras paseaba con su dueño en Polonia.
El hecho ocurrió cerca de la pequeña ciudad de Limanowa, en la región sur del país, según informó el canal de noticias polaco TVP World.
El 11 de octubre, el museo local de historia anunció la noticia a través de un artículo en su página web.
“¿Hay que ser Indiana Jones para descubrir yacimientos arqueológicos fascinantes? No necesariamente”, advirtió el Museo Regional de la Tierra de Limanowa (Muzeum Regionalne Ziemi Limanowskiej).
Un día, según la entidad, un ciudadano llamado Paweł emprendió un recorrido por una zona boscosa cercana a Limanowa junto a su perro, Ryszard.
En un momento, durante la caminata, el can se fijó en en algo que sobresalía del suelo. Era una pieza de metal, pero no una cualquiera: de acuerdo con el museo, resultó ser “extraordinaria” e “invaluable”.
Tras el descubrimiento del perro, Paweł desenterró el objeto de la tierra y quedó sorprendido: acababa de hallar una punta de lanza milenaria. El artefacto, de casi 30 centímetros de largo, estaba “muy corroído”, según los expertos.
Enseguida, el hombre contactó a las autoridades encargadas del asunto, como corresponde en este tipo de casos.
“Cuando llegaron los arqueólogos, (NdR: Paweł) les entregó el objeto y les indicó el lugar del descubrimiento. El examen inicial de la punta de lanza determinó que probablemente se fabricó en el siglo II o III d. C., dentro de la cultura de Przeworsk”, afirmó el museo en su web.
La cultura de Przeworsk es, de acuerdo con el Museo de la Cultura de Przeworsk (Muzeum Kultury Przeworskiej), “una cultura arqueológica de la Edad del Hierro que se desarrolló entre el siglo III a. C. y el siglo V d. C. en lo que hoy es Polonia y Transcarpatia (NdR: sudoeste de Ucrania)”.
“Los pueblos de esta cultura se dedicaban principalmente a la agricultura y la ganadería, aunque también eran expertos en la forja del hierro y la alfarería (comenzaron a utilizar la rueda en el siglo III). Establecieron asentamientos a lo largo de los ríos y vivían en casas construidas sobre la superficie, con fogones u hornos en el interior y fosas de almacenamiento en el exterior (NdR: para guardar alimentos). El comercio con los romanos les proporcionó monedas, bronce, vidrio, vajillas lacadas en rojo y adornos personales. La práctica funeraria habitual era la cremación, y los restos se colocaban en fosas o urnas”, informó la Enciclopedia de Ucrania, según un artículo web.
Por otro lado, con respecto a la punta de lanza, los expertos calculan que tiene más de 1700 años.
“Aún no sabemos si fue dejada allí (NdR: la lanza) por un miembro de la tribu germánica de los vándalos o los burgundios. Lo que sí se sabe es que la punta de lanza permaneció en este suelo durante más de 1700 años, hasta que un día llamó la atención de Ryszard, el perro, y de su dueño, el señor Paweł, a quienes hay que felicitar por este descubrimiento“, aseveró el museo de historia de Limanowa, que puso el artefacto a resguardo.
Por otra parte, la entidad afirmó que la punta de lanza hallada es el primer artefacto arqueológico oficialmente registrado en Limanowa desde finales del siglo XIX.
Fuente: www.clarin.com



