El show de Zeballos y Merentiel en Boca Predio: risas, chicanas y pura química :: Olé

La Bombonera todavía vibra cuando se repite la imagen del segundo gol a River: corrida del Chango, centro al medio y definición de la Bestia. Otra vez, los dos. La conexión que encendió el superclásico sigue dando que hablar, y esta vez no fue en la cancha, sino fuera de ella. En el regreso a los entrenamientos, después de la primera jornada del miércoles, Zeballos y Merentiel compartieron un rato juntos en las redes oficiales del club y armaron un show de risas y chicanas que pintan cómo está el grupo. Pura química.

“Una máquina el Chango, te encara y chau, fuiste”, tiró Merentiel, mientras el Chango lo miraba de reojo y devolvía rápido: “Sí, pero él ya sabe que estoy ahí, tack, para definir. Si me deja solo sin arquero, no fallo jajaja”. La broma se mezcló con la memoria del gol, ese que sellaron juntos el último domingo ante River, con corrida de Zeballos, pase al medio y remate de Miguel : “No es un hijo de p…, es bueno este, cómo hace goles, mal”, dijo entre risas el santiagueño.

Cuando le recordaron que Merentiel ya le marcó cuatro veces a River, los ojos del 7 se abrieron de par en par. “Es increíble, es increíble”, repitió. “ Y… yo estoy ahí, olfateando”, devolvió Miguel, fiel a su estilo, con una sonrisa que lo dice todo.

Entre risas también repasaron sus festejos del superclásico, ese bailecito a lo Neymar del 7 de Boca que copó las redes. Pero la charla se desvió al abrazo con la gente tras su primer gol: “Con la gente ahí”, resumió Merentiel. “ No, pero el tuyo es el del alambrado”, le contestó el Chango. “El mío es el del alambrado, pero yo te voy a saltar para el otro lado”, retrucó Miguel . “Por eso no me sacaron amarilla, porque no era alambrado”, remató Zeballos, muerto de risa.

Y claro, el tema de la metralleta también salió. “¿El festejo de él te gustó?”, le preguntaron al santiagueño. “Sí, me encanta, ese me gusta”, respondió. Merentiel la siguió: “Digamos que fue al aire, che”. “¿Y el cargador?”, lo apuró el Chango. “No, todavía me quedan un par de balas”, devolvió la Bestia, entre carcajadas. ¿Estarán contra Tigre el domingo?

Ya más tranquilos, se tiraron flores. “Que siga así, es muy importante para nosotros”, dijo el uruguayo sobre su compañero. “Aceite, aceite a la bicicleta”, agregó entre risas. “Sí, que le tire aceite y arranca”, completó Miguel.

Antes del cierre, hubo espacio para hablar del look del 7, su vincha y el pelo largo: “No se corta más el pelo, vincha y pelo largo desde ahora”, avisó. “Al principio no me la bancaban”, confesó entre risas.

Dos pibes con química, alegría y fútbol. El Chango y la Bestia, la dupla que Boca disfruta dentro y fuera de la cancha.