Chacarita y 2025 para enterrar en el olvido: de ser líder a quedar fuera del Reducido :: Olé

Enterrado en el olvido. Así quedará el 2025 de Chacarita, un equipo que pasó de la ilusión a la decepción, de pelear arriba a quedar afuera de todo, de ganar y ganar a cerrar el año con diez encuentros sin poder hacerlo (la última vez fue el 26 de julio). El fracaso, uno más, en este caso duele mucho más. Porque la implosión se empezó a ver hace unos meses, se evidenció con las explosivas declaraciones del presidente Néstor Di Pierro contra los jugadores y se terminaron de cristalizar con el 0-2 ante Gimnasia de Jujuy que lo dejó sin la chance de jugar el Reducido.
La desconcentración de la defensa del Funebrero al minuto de juego que derivó en el gol de Joaquín Trasante y el golpe de puño de un experimentado como Alejandro Rébola a los 17’ del primer tiempo fueron dos imágenes que dejaron en claro la importancia de un conjunto que estaba perdido desde hace mucho tiempo. El Vasco Azconzábal no le encontró la vuelta y, a pesar de la llegada de Carlos Mayor, tampoco hubo una reacción. Hace un par de fechas había salido de los puestos de Reducido y, si bien llegó a la última jornada con chances de colarse en el mini torneo, sufrió todo el tiempo en el Norte y el Lobo le hizo precio con el 2-0.
Los resultados de este domingo modificaron algunas posiciones de cara a los cruces de la primera instancia, aunque no hubo cambios de equipos. Claro, ni Chaca ni Defensores de Belgrano (0-1 vs. Gimnasia de Mendoza), los dos que podían meterse en el Reducido, lo consiguieron. De esta manera, los ocho clubes que irán por el segundo pasaje a la elite del fútbol argentino son: Estudiantes de Río Cuarto, Estudiantes de Caseros, Morón, Gimnasia de Jujuy, Temperley (3-0 a Chicago), Agropecuario (2-0 a San Telmo) y Chaco For Ever (1-1 con Morón).
El final de Chaca fue una crónica anunciada. De soñar con el regreso a Primera a quedarse sin nada. Otra temporada que se suma a la larga lista de frustraciones recientes. La reconstrucción deberá ser profunda. Porque lo de este año no fue solo un mal torneo: fue una advertencia.
Fuente: www.ole.com.ar