La inesperada decisión que tomó Chuck Norris por amor: “Ella es más importante que mi carrera”

Con el personaje de Cordell Walker en Walker, Texas Ranger, Chuck Norris llegó a su punto máximo de fama y ganó su lugar irremplazable en el cine de acción.
La serie se emitió por primera vez entre 1993 y 2001 y le implicó a Norris combinar secuencias de máxima destreza física con momentos de reflexión que agregaban un condimento emocional a la historia.
Así pudo unir varias aristas de su vida. Porque, por un lado, como registra el sitio del departamento de Defensa de Estados Unidos, en 1958 Norris se alistó en la Fuerza Aérea y recibió la especialidad militar que hoy se conoce como Fuerza Aérea.
Después de un año en Arizona, fue enviado a Corea del Sur y allí comenzó a entrenar judo.
Luego, en la década de 1960, cuando transitaba sus veintitantos, Norris se convirtió en instructor de karate y abrió una cadena de escuela de entrenamiento Los Ángeles. Entre sus clientes famosos figuran Steve McQueen, Priscilla Presley, Donny Osmond y Marie Osmond.
Además, el sitio especializado Miu Fitness cuenta que desarrolló un entrenamiento riguroso y multidisciplinario que fue clave para su éxito en el cine de acción. Distintos medios cuentan que hacía un plan de ejercicio durante tres horas que incluía flexiones, abdominales, sparring y patadas a los sacos.
Al mismo tiempo, su historia de vida y sus decisiones revelan su sensibilidad y su férrea escala de prioridades.
Concretamente, el personaje de Walker es un integrante de referencia del cuerpo policial de élite de ese estado y cumple con funciones de investigación criminal, aplicación de la ley y asistencia a fuerzas locales en casos complejos.
En ese rol debe enfrentar diversos desafíos, desde casos de homicidio hasta tramas de corrupción, mientras mantiene su compromiso con el honor y la ética.
Después de Texas Ranger, su carrera había alcanzado un pico de fama y tenía más proyección. Sin embargo, unos años más tarde, como cuenta el sitio Vanitatis tomó una decisión inesperada. Ya que en 2013 optó por dejar su carrera para cuidar a su esposa, Gena O’Kelley.
La ex modelo había sufrido en ese momento una negligencia médica que le dejó importantes secuelas. Una nota de El Comercio de Perú cuenta que O’Kelley fue inyectada con gadolinio, un elemento químico que dañó su sistema nervioso y le hizo perder ciertas habilidades.
“Le dieron una inyección previa a un escáner corporal, para comprobar las características de su artritis”, relató el actor a El País.
El no dudo en dedicarse full time a ella. Además, destinó enormes recursos para su tratamiento y demandó a las farmacéuticas responsables.
“He abandonado mi carrera cinematográfica para dedicar mi vida entera a mantener viva a Gena. Eso es lo más importante, que ella continúe con nosotros y que lo que le ha ocurrido no lo sufra nadie más. Mi amor por ella es más fuerte que mi carrera, el dinero, cualquier otra cosa”, dijo en ese momento.
Luego, en 2017, sufrió dos infartos que milagrosamente pudo superar.
Chuck Norris cumplió el 10 de marzo 85 años. Y, contra todo pronóstico, en 2024, a sus 84, volvió al cine con la película Agent Recon, un thriller de ciencia ficción sobre un grupo de seguridad que investiga experimentos alienígenas en Nuevo México. Además, sigue con su entrenamiento de pesas.
Ella, según las notas más recientes, superó los momentos de salud más álgidos. Además, sigue al frente de la empresa de embotellado CForce, que comparte con Chuck, y preside en conjunto a organización benéfica Kickstart Kids, que promueve la enseñanza de karate a niños, como fin para inculcar valores como disciplina, respeto, honestidad, lealtad, dedicación, valentía, responsabilidad y amabilidad
La frase de él en un posteo reciente en Instagram da cuenta del espíritu que los impulsa: “Sigo superando mis límites cada día. ¡Por mantenerse activo y disfrutar todo momento!”.
Fuente: www.clarin.com